Cada vez más cosas tienen su día. Desde un territorio, una comida, una expresión facial o hasta un útil de escritura…
Hay diferentes opiniones sobre el nacimiento del Gin Tonic. Unos atribuyen la paternidad a los oficiales ingleses que para brindar por sus victorias en la India crearon el combinado, leyenda poética y otros al valor curativo de la tónica y a su amargo sabor.
Fue Jacob Schweppe (1793) el primero que logró introducir burbujas de anhídrido carbónico en el agua, puso una fabrica en Londres, J Scheppe & Co, y triunfó con las sodas de frutas que pronto de convirtieron en la bebida de moda. En 1870 decidieron crear un tónico para luchar contra la malaria y el paludismo, enfermedades que destrozaban a las tropas de las Colonias del Imperio Británico, introdujeron quinina, extracto de una planta medicinal de Sudamérica con grandes propiedades curativas, en el agua carbonatada de naranja y ese día nació la tónica.
Juntarla con la ginebra fue cuestión de supervivencia, a la tropa no le gustaba el sabor amargo del jarabe medicinal y le añadieron el alcohol para hacerla mas tolerable, logrando una bebida refrescante, digestiva y muy agradable de consumir.
Desde esos tiempos ha llovido mucho y el Gin Tonic se ha convertido en una bebida de moda y de culto. Hay templos del G&T, lugares en los que las diferentes ginebras y tónicas modernas son las reinas.
La ginebra actual esta muy lejos de la clásica inglesa del siglo XIX, hoy les añaden diferentes botánicos que las llenan de aromas y de sabores. Ya no sólo se elabora un Gin Tonic con hielo y la rajita de limón que según los puristas es un grave error utilizar (se debe poner un trocito de cascara) ya que el acido cítrico del limón destruye las burbujas del carbónico de la tónica. Se le añade pepino, frutas del bosque, uvas, cardamomo, en resumen cualquier aditivo que resalte los botánicos de la ginebra.
Se hacen catas de Gin Tonic, se venden gran cantidad de ginebras en las tiendas especializadas que se precien, se escriben artículos, se crean barras de G&T en los lugares de moda y cada vez es una bebida más popular y más elitista aunque suene a contradicción, cada día se consume más y cada día es un trago más selecto y especial.